Malibu Auto se posiciona como la variedad automática más sativa de la selección. Proveniente de la fusión entre Malibu y Rudelaris, esta cepa hereda un intenso aroma a haze con sutiles matices terrosos de sus ancestros. Caracterizada por su naturaleza sativa, Malibu Auto sorprende al generar cogollos exuberantes cubiertos de tricomas blancos en tan solo 14 semanas desde la germinación, ofreciendo un deleite para los sentidos.
Con un alto contenido de THC que alcanza el 25%, esta variedad automática promete una experiencia potente y satisfactoria. Malibu Auto se presenta como una opción fascinante para aquellos que buscan una cepa automática con las características distintivas y el impacto psicoactivo asociado con las sativas.
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